El Bebé Moisés
Una historia que muestra cómo Dios cuida de nosotros desde el principio
La historia del bebé Moisés es una de las más tiernas y poderosas del Antiguo Testamento. En esta lección de Escuela Dominical para primer grado, los niños descubren cómo Dios protegió la vida de un pequeño bebé que crecería para convertirse en uno de los líderes más importantes de toda la Biblia.
Un pueblo en peligro… pero bajo el cuidado de Dios
Los israelitas estaban viviendo en Egipto y se habían convertido en un pueblo muy grande. El nuevo faraón, que no recordaba a José ni lo que había hecho por Egipto, empezó a temer su número y su fuerza. Su respuesta fue cruel: obligó a los israelitas a trabajar duramente y finalmente ordenó que todos los bebés varones fueran arrojados al río Nilo.
Pero incluso en un ambiente tan peligroso, Dios seguía cuidando a Su pueblo.
Una madre valiente y un plan lleno de fe
En medio de esta tragedia nace un bebé hermoso: Moisés. Su madre, Jocabed, decidió protegerlo a cualquier costo. Durante tres meses lo escondió, hasta que ya no pudo hacerlo más. Entonces ideó un plan sorprendente y lleno de confianza en Dios: colocó a su bebé en una canasta impermeable y lo puso entre las plantas del río, mientras su hermana Miriam vigilaba desde lejos.
Un rescate inesperado
La hija del faraón encontró la canasta, vio al bebé llorando y sintió compasión. En ese momento, Miriam intervino y ofreció encontrar a una mujer hebrea para amamantarlo… ¡y trajo a Jocabed! Dios orquestó todo para que la madre de Moisés pudiera seguir cuidándolo sin temor.
Cuando el niño creció, fue adoptado por la princesa, quien lo llamó Moisés, “sacado de las aguas”.
Preparado para un gran propósito
Aunque Moisés creció en el palacio, aprendiendo todo sobre Egipto, jamás olvidó al Dios verdadero. Él tenía un propósito especial, y Dios lo estaba preparando desde bebé para cumplirlo.
Esta lección enseña a los niños que:
Dios nos conoce desde antes de que podamos hablar o caminar.
Él nos cuida y protege incluso en los momentos más difíciles.
Dios tiene un plan para cada vida, grande o pequeña.
Perfecto para tu clase de Escuela Dominical
El material incluye narración clara, ilustraciones, aplicaciones prácticas y un versículo hermoso para memorizar:
Salmo 139:17 — “¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos!”
