¿Qué es la Ley?

  1. La Ley es el Pacto Mosáico. Es un pacto bilateral y condicional entre la nación de Israel y Dios, donde resultan bendiciones por obediencia o maldiciones por desobediencia. (Deuteronomio 28:1-68)

  2. La Ley fue dada a los descendientes étnicos de Abraham a través de Isaac y Jacob identificados por la circuncisión. La prueba de que Israel estaba bajo el Pacto Mosáico era la observación del séptimo día de reposo, el Shabat (Éxoco 31:12-15)

  3. El Pacto Mosáico no salvaba a los que lo observaban. Aquellos bajo el Pacto Mosáico eran el pueblo de Dios, pero no todos bajo el Pacto Mosáico eran salvos. Ese pacto no podía impartir justicia (Romanos 3:20, 3:28, Gálatas 2:16, 21; Hebreos 7:19; 10:1), solo podia revelar la injusticia y así revelar la naturaleza del hombre como muerto en pecados y delitos (Romanos 3:20, 7:7-13)

  4. El Pacto Mosáico sí dirigía a Mesias a traves de sus alabanzas, sacrificios, sacerdocios y otras leyes. Debía guiar a Israel hacia la fe en la gracia, formar su entendimiento de la santidad y preparadlos para entender el evangelio del Nuevo Pacto. (Gálatas 3:24; Hebreos 10:1; Colosenses 2:17) Israel entendía desde el principio que el Pacto Mosáico era temporal (Deuteronomio 18:15-19)

  5. El Pacto Mosáico buscaba formar un pueblo primitivo en una cultura separada y única de fe y devoción radical a Yahweh (Deuteronomio 14:2; 4:5). La Ley resultó en una estructura por la cual el Israelita era recordado de Dios a cada momento: alimentos (agricultura, dieta, preparación), vestimenta, limpieza, emisiones corporales, enfermedades de la piel, el matrimonio, propiedad privada, siervos, préstamos, caridades, jurisprudencia, idolatría, brujería, relaciones prohibidas, junto con un ritmo diario, semana, mensual y anual de fiestas, ofrendas y sacrificios a ser observados. Esto tenia el efecto practico de regular la vida y la salud, promoviendo justicia, pero la meta final era inculcar una visión teocéntrica de la vida y una dependencia de Dios. Dios, deliberadamente, usó el clima, la topografía, los habitantes y la posición geográfica de la tierra de Israel para estimular fe en Él.

  6. La naturaleza externa de la Ley debía ser reflejada en el interior (Deuteronomio 6:6; 10:12-16; 11:18-20; Proverbios 3:3; 7:3; Salmo 37:32; 40:8; Isaías 51:7). Mientras algunos Israelitas lograron esto por gracia por medio de la fe, solo el Nuevo Pacto puede lograr una adopción interna y universal de la Ley de Dios a todos los que se encuentra bajo el.

La Estructura de la Ley

Muchos han contado 613 leyes, 245 de los cuales son mandamientos positivos y 365 negativos. 

La Ley es un cuerpo indivisible. Ninguna parte puede ser separada de lo demás, ni porciones obedecidas y otras ignoradas. (Levítico 18:5; Santiago 2:10; Gálatas 3:10)

Parte 1: La Ley Moral, o los Diez Mandamientos. Esta parte de la Ley gobierna la vida moral dando dirección a Israel en cuando a principios del bien y del mal en relación a Dios y el hombre (Éxodo 2:1-17).

Parte 2: Los Juicios, o la Ley Social. Esta parte de la Ley gobernaba a Israel en su vida secular, social, política y económica (Éxodo 21:1–23:13, Levítico, Números). 

Parte 3: Las Ordenanzas o la Ley Ceremonial. Esta era la porción religiosa de la Ley que dirigía a Israel y proveía para la adoración y relación espiritual y compañerismo con Dios. Incluía el sacerdocio, el tabernáculo y los sacrificios (Éxodo 25:3, Levítico, Números). La ritual de la limpieza forma parte de ésta Ley. 

El libro de Deuteronomio es la segunda entrega de la Ley – para la generación que se crió después de los 40 años en el desierto. 

El fin y la sustancia de la Ley se puede reducir a dos mandamientos, que al fin de todo, son uno: Marcos 12:28-30. 

El Cumplimiento de la Ley: El Nuevo Pacto en Mesías

Mosáica

individual, no necesaria para salvación

externa, no necesariamente reflejada en el interior

pedagógica, no necesariamente efectuada

Nuevo

salvación nacional

universal, reflejado en el interior

completamente efectuada

1) Mesías cumplió la Ley (Mateo 5:17-18; Efesios 2:15, Colocenses 2:16-17). Esto significa que El guardo sus instrucciones y prohibiciones perfectamente, incluso siendo la sustancia de los tipos que le señalaban a El. Sin embargo, significa más que eso. Significa que la Ley alcanzó su pinto final, su cumplimiento y si meta en Cristo mismo. (Romanos 10:4). El es el punto final y la levanta y establece un Nuevo Pacto continuando lo que Él desea y despechado lo que no desea. 

2) Mesías usó Su autoridad para enmendar o suplir la Ley de Moises con la Suya propia (El Sermon del Monte, Mateo 12:8, Mateo 19:9). Se hace contraste entre Cristo y Moises. Jesús no solamente apoya la Ley de Moises, El es el dador superior de la Ley (Juan 1:17; Hebreos 8:6-13). 

3) Con Su muerte, El inaugura el Nuevo Pacto y en el día de Pentecostes, El envía al Espíritu Santo a morar en cada creyente en el Nuevo Pacto. Cada creyente, (Judío o Gentil) que muere con Cristo viene a estar bajo el Nuevo Pacto, y así muere a la autoridad de la Ley. El muerte de Cristo cumple con las penas de la Ley. La vida de Cristo perfectamente cumple la justicia de la Ley. El Creyente viene a estar bajo nueva autoridad – ‘bajo gracia’, ‘la ley de Mesías’ Cristo (6:14, Romanos 7:1-4, Romanos 10:4, I Corintios 9:21, Gálatas 6:2). 

4) La señal del nuevo pacto ya no es el Shebat, sino la morada del Espíritu Santo simbolizada en lo exterior por el bautismo. 

¿Qué leyes gobiernan el creyente del Nuevo Pacto?

  1. El Nuevo Testamento (testamento = pacto) nos guía en términos de qué aspectos de la Ley de Moises se aplican, cuáles se abandonan y cuáles son completamente nuevos. Las Leyes que se dieron a Israel que se ligan específicamente a la tierra, la economía, los ritmos de la vida del Israelita, el concepto de lo limpio y lo inmundo, la identidad de Israel como un pueblo separado se identifican fácilmente como aspectos de la Ley que no aplican en el Nuevo Pacto. Para entender continuamente, buscamos instrucciones repetidas, no solo negaciones únicas. Sin las instrucciones, normalmente consideramos la Ley como no-aplicable. Aún podemos extraer principios morales eternos de muchas Leyes.

  2. La Ley de Cristo ahora es amor por Dios, hermanos, prójimos y enemigos. Este es el estándar más alto posible. Al hacer esto, no ‘hacemos’ la ley, sino que ‘cumplimos’ la Ley (Romanos 13:10, Gálatas 5:14).

  3. Solo podemos cumplir con esto porque el Espíritu Santo mora en nosotros (Gálatas 5:18, Romanos 8:3-4. Usando la Palabra de Dios entre la el pueblo de Dios del Nuevo Pacto, el Espíritu Santo nos transforma internamente y progresivamente.

La Ley sigue siendo pertinente a los creyentes del Nuevo Testamento, pero no nos regula. Como un testimonio de la justicia de Dios, nunca se abandona (Romanos 3:31). Sigue siendo el ayo de la justicia, un agente de convicción y un tipo de Cristo